Y el desenlace de la anterior. Con una semana de retraso, los pjs recurren a la pnj, la cosa se lía y terminan con un combate en las alcantarillas. Tres de los pjs, porque la cuarta no bajó por ser cosa poco femenina que le habría supuesto otra bronca con sus padres.
Con esto se me acabaron todas las partidas que tenía pensadas al arrancar la campaña, salvo dos que aún buscan acomodo. Estoy aún a tres sesiones por detrás de lo jugador, pero con lo del coronavirus espero ponerme al día.
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Y el desenlace de la anterior. Con una semana de retraso, los pjs recurren a la pnj, la cosa se lía y terminan con un combate en las alcantarillas. Tres de los pjs, porque la cuarta no bajó por ser cosa poco femenina que le habría supuesto otra bronca con sus padres.
Con esto se me acabaron todas las partidas que tenía pensadas al arrancar la campaña, salvo dos que aún buscan acomodo. Estoy aún a tres sesiones por detrás de lo jugador, pero con lo del coronavirus espero ponerme al día.
Está siendo una campaña muy difícil de gestionar. La parte buena es que ya no me estresa pensar en ella (hubo unos meses que estuve a punto de cancelarla, porque se me juntaba con el estrés del trabajo y me daba unos viajes al pecho que me dejaban doblado), la parte mala es que empieza a haber algunos roces entre jugadores.
Vamos cerrando la 1ª temporada de la campaña con una adaptación libre de un módulo de 7º Mar. En la imagen pueden ver el recital que NO se debía haber producido, pero ya se sabe que el máster preparara el guion de la aventura y los jugadores lo utilizan satisfacer sus necesidades de la forma más extraña y paranoica posible.
Baile de máscaras, campaña de capa, espada y horrores del pasado para Ánima Beyond Fantasy.
Aprovechando la historia de uno de los pjs, monté una aventura de traiciones y venganzas, donde el protagonista insospechado fue otro de los jugadores con un mal día de encadenar meteduras de pata.
Vale, Ánima no es Runequest y encarar mal un combate no significa que termines recogiendo tus pedazos del suelo, pero casi. Si no llego a tomar medidas previamente, ahora tendríamos un pj menos. O dos, por la mala costumbre de compartimentar información.